El urbanismo en la antigüedad
Las ciudades, tanto
religiosas como cívicas, fueron orientadas de modo que las mismas tuvieran un
sentido estético. Las calles fueron trazadas de acuerdo a un sistema de cuadrícula
y las viviendas fueron integradas a las instalaciones culturales, comerciales y
defensivas.
El Plan Cerdà fue un plan de reforma y ensanche de la
ciudad de Barcelona de 1860 que seguía
criterios del plan hipodámico, con una estructura en cuadrícula, abierta e igualitaria. Fue creado por
el ingeniero Ildefons Cerdà y su
aprobación fue seguida de una fuerte polémica por haber sido impuesto desde el
gobierno del estado español en contra del plan de Antoni Rovira i Trias que había
ganado un concurso del Ayuntamiento de Barcelona.
El Plan Castro, inspirado en el de Cerdá para Barcelona, suponía el paso
de la ciudad de 800 a
2.300 hectáreas ,
basándose en un cálculo sobre el aumento de población de la ciudad. Mediante
una retícula ortogonal, el plan suponía añadir una corona de terreno a la
ciudad por norte, este y sur, ordenando los usos del suelo (residencial,
industrial, militar, esparcimiento, agropecuario). Finalmente, la ciudad seguía estando limitada
por motivos militares y fiscales, pero ya no por una muralla, sino por un foso.
js:)
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